Salud

¿Qué es el agrandamiento de la próstata y cuándo es necesaria la cirugía?

Al contrario de lo que muchos piensan, el agrandamiento de la próstata es algo natural en los hombres -que se intensifica con la edad- y no siempre requiere de una intervención quirúrgica. Tampoco debe verse como sinónimo de cáncer. Son pocos los casos que deben resolverse quirúrgicamente y, hoy en día, existe incluso una técnica que puede preservar la capacidad eyaculatoria del paciente, el Urolift.

  • Faloplastia: ¿es seguro aumentar el tamaño del pene? Comprender los riesgos involucrados
  • Biopsia innovadora para detectar cáncer de próstata se populariza en Brasil

En los últimos años, diferentes tecnologías han mejorado la calidad de vida de los hombres que necesitan una cirugía de próstata, reduciendo el tiempo de recuperación, por ejemplo. En este campo son muy prometedoras las cirugías robóticas, que proporcionan al cirujano una visión tridimensional de la región.

Para comprender el motivo del agrandamiento de la próstata y conocer las técnicas más novedosas para este tipo de procedimientos, FreeGameGuide habló con el urólogo y oncólogo Bruno Benigno, especialista en cirugía robótica.

¿Por qué la próstata comienza a agrandarse a partir de cierta edad?

En el cuerpo masculino, la próstata es un órgano que está presente tanto en el sistema urinario como en los genitales masculinos. Básicamente, el casquillo es una especie de conector. Además, se encarga de producir una sustancia que alimenta a los espermatozoides, el líquido seminal.

Para cumplir sus funciones, la próstata está directamente influenciada por la hormona testosterona. Esta comienza a producirse en la pubertad y alcanza su punto máximo cuando el individuo cumple los 21 años. En la propia glándula, la testosterona se convierte en una enzima 100 veces más potente que ella misma, la dihidrotestosterona (DHT).

“La próstata de todos los hombres crece debido a la conversión de testosterona en DHT. Pero hay otros factores que pueden acelerar el crecimiento, por ejemplo el síndrome metabólico”, explica Benigno. Esto ocurre, por ejemplo, cuando el paciente tiene un estilo de vida sedentario o duerme mal. Ambos comportamientos, cuando se mantienen, contribuyen a este crecimiento.

En general, “la principal razón por la que la próstata crece es el efecto biológico de la testosterona. Sin embargo, hay otras sustancias, como la insulina [cuando aumenta crónicamente en la sangre] que pueden funcionar como factor de crecimiento”, añade.

¿Qué es el agrandamiento de la próstata?

Hablar de agrandamiento de la próstata es una expresión muy genérica, ya que no permite comparaciones. En un hombre sano de hasta 30 años, la próstata tiene el tamaño de una nuez y pesa entre 25 y 30 gramos. Vale recordar que, en urología, cada gramo equivale a un centímetro cúbico de próstata. Por lo tanto, se aceptan ambas formas de dimensionamiento.

“Con el tiempo, la próstata crece y suele crecer a un ritmo de 0,7 a 1 gramo por año”, explica el médico. A pesar de la estimación, se trata de una tasa muy variable y siempre debe entenderse dentro del contexto del paciente.

Ahora bien, una próstata grande se puede definir como aquella que pesa más de 60 gramos. Uno muy grande e hiperplásico pesa más de 100 gramos. “La próstata puede alcanzar volúmenes gigantescos, pesando entre 300 y 350 gramos. Son pinturas más raras”, comenta.

¿Todo agrandamiento de próstata requiere tratamiento?

Es muy común que la gente piense que todo agrandamiento de próstata debe resolverse en la mesa de operaciones, pero esto no es necesariamente cierto. La intervención quirúrgica depende, entre otros factores, de los síntomas que refiera el paciente y de la intensidad de estas quejas, cuando se sabe que no se trata de una neoplasia maligna.

“No todos los agrandamientos de próstata conllevarán la necesidad de tratamiento. Esta necesidad se produce cuando la próstata crece y este crecimiento provoca el estrechamiento del canal que pasa por la próstata, la uretra”, explica el médico. “El tratamiento se basa no sólo en el tamaño de la próstata, sino en la intensidad de los síntomas”, refuerza.

En general, existen tres categorías de síntomas relacionados con el agrandamiento de la próstata:

  • Luz;
  • Moderado;
  • Intenso.

En la mayoría de los casos, el tratamiento farmacológico o quirúrgico sólo está indicado para aquellas personas con síntomas de moderados a graves. En estas circunstancias, el hombre puede tener una infección recurrente, alteración de la filtración renal, cálculos en la uretra o dificultad para orinar, por ejemplo.

Para los casos leves, el tratamiento consiste en proponer un cambio en el estilo de vida del individuo. Esto se puede traducir en dormir mejor, adoptar una rutina de actividad física y llevar una dieta equilibrada. Estas intervenciones “son muy efectivas para hombres con próstatas grandes y síntomas leves”, dice Benigno.

¿Cómo puede crecer la próstata?

Una curiosidad que está directamente ligada a la necesidad de una intervención quirúrgica es la dirección en la que crece la próstata:

  • Hacia adentro: tiende a estrechar la uretra, desencadenando diferentes tipos de síntomas;
  • Exterior: suele mantener el canal ancho y no provoca síntomas urinarios.

¿Cómo saber si es un crecimiento benigno o canceroso?

Otro mito relacionado con la próstata es que todo crecimiento es un caso de cáncer, lo cual no es cierto. Incluso un hombre puede tener una próstata pequeña y contraer cáncer de glándula. “El tamaño no tiene correlación con el riesgo de tener cáncer o no”, apunta Benigno.

Sin embargo, saber si el paciente tiene o no cáncer de próstata es fundamental para definir qué tratamiento se adoptará. Para responder a esta pregunta, es necesario investigar la imagen, incluida la edad y los antecedentes familiares.

La investigación clínica tiende a comenzar con la prueba de PSA (antígeno prostático específico). En él vale la pena observar si el indicador es demasiado alto y qué tan rápido está creciendo. El urólogo también puede realizar un examen físico, ya que la próstata normalmente tiene una consistencia blanda y está blanda. También se pueden considerar la ecografía y la resonancia magnética. Finalmente, se realiza una biopsia.

¿Cómo funciona la cirugía de agrandamiento de la próstata?

Cuando el médico finalmente descarta el riesgo de cáncer, llega el momento de entender cómo se corregirá la hiperplasia prostática benigna. Para las intervenciones quirúrgicas que amplían el canal, es fundamental conocer el tamaño de la glándula.

Próstata que pesa entre 80 y 90 gramos.

Para próstatas de estas dimensiones la cirugía se suele realizar desde la uretra y consiste básicamente en agrandar el canal. El raspado se puede realizar con un bisturí o con la ayuda de un láser: el láser verde. Además, el Urolift es una opción nueva en el mercado brasileño, pero común en otros países, como Estados Unidos.

A diferencia del raspado, la nueva técnica utiliza un tipo de fórceps que no daña el tejido y al mismo tiempo abre el canal desde el interior. “Es rápido, dura menos de 20 minutos y se puede realizar con una ligera sedación”, explica Benigno. En estas circunstancias, el paciente es dado de alta el mismo día y, de una forma sin precedentes, consigue conservar la eyaculación. “Esto no es posible con otras técnicas existentes”, afirma.

Sin embargo, la técnica, que llegó a Brasil en agosto, presenta un mayor riesgo de retratamiento, es decir, en algún momento el paciente puede necesitar recurrir nuevamente al procedimiento. Otra limitación es el precio, ya que sólo el material cuesta alrededor de 25 mil reales.

Próstata que pesa más de 90 gramos.

Para próstatas más grandes, las intervenciones iniciadas por la uretra o Urolift no están disponibles. En estos casos, la estrategia principal pasa por la cirugía abdominal. Lo más tradicional es realizar una incisión debajo del ombligo hasta el pubis, donde el cirujano extirpará el interior de la próstata.

El procedimiento puede ser menos invasivo cuando se utiliza una microcámara. En estas circunstancias, el equipo de vídeo entra por el ombligo y se realizan agujeros en la zona para alojar las pinzas. Más recientemente, este tipo de videocirugía se ha actualizado con la ayuda de un robot.

En la cirugía robótica de próstata, el profesional sanitario tampoco necesita abrir el abdomen del paciente, simplemente introduce la cámara y las pinzas robóticas, una especie de mano en miniatura, que proporciona al médico una mayor movilidad. En este caso, es posible tener una vista 3D de la región y un mayor nivel de definición, lo que mejora la tasa de éxito del procedimiento.

Dr. Pedro Romanelli

Dr. Pedro Romanelli (escritor médico): el Dr. Pedro Romanelli es un experto en redacción médica con más de 17 años de experiencia escribiendo y editando artículos, blogs, reseñas de productos, libros electrónicos, noticias, comunicados de prensa y más para varias marcas de atención médica. Especializado en educación sobre salud pública, el Dr. Pedro Romanelli utiliza material científico para escritos médicos generales y traduce la investigación médica a un lenguaje simple que los pacientes puedan entender antes de someterse a una cirugía o planificar planes de tratamiento. Sus funciones y responsabilidades en credihealth incluyen: Consultar a médicos y otros expertos médicos sobre sus experiencias con diversos tratamientos, ensayos clínicos o procedimientos. Sus otras áreas de interés incluyen tratamientos mínimamente invasivos para cálculos renales y ureterales, laparoscopia reconstructiva (pieloplastia, corrección de reflujo, neovejiga) y abordaje laparoscópico del cáncer testicular.